Sociedad & Estilos de vida

En este sentido, un estudio de encuadre consta de dos etapas distintas:

• • Una fase exploratoria cualitativa. En primer lugar, se trata de abarcar en su globalidad toda la diversidad de percepciones, representaciones, prácticas y opiniones inherentes a las actitudes y comportamientos de los consumidores.

Esta etapa permite aprehender en profundidad sus conocimientos sobre las temáticas ligadas a su problemática y además es la ocasión para actualizarlos captando y sacando a la luz nuevos elementos.

En este sentido, se trata de identificar el conjunto de comportamientos clave, además de la lógica asociada, con el fin particular de revelar necesidades y carencias aún inconscientes.

Para ello, realizamos entrevistas individuales y/o grupos de discusión de acuerdo con la naturaleza del estudio. Pero podemos recurrir igualmente a otras técnicas, tales como la observación a domicilio, o incluso “en vivo”, es decir, en plena situación de consumo.

• Una fase de medida cuantitativa. Se trata, en segundo lugar, de darles una dimensión cuantitativa a los resultados obtenidos durante la primera fase con el fin de validar las hipótesis formuladas, medir la amplitud de los fenómenos o la importancia de los comportamientos y garantizar la fiabilidad y la precisión de los datos recolectados.

Entender en profundidad de los comportamientos sacados a la luz en la etapa cualitativa, nos permite después redactar un cuestionario óptimo, pues se ajusta plenamente a la realidad. Con el fin de seguir bajo esta perspectiva de contextualización de los entrevistados, el terreno cuantitativo de los estudios de encuadre se realiza a menudo en el domicilio del entrevistado, cara a cara o en línea.

Por otra parte, cuando la frecuencia de consumo o el tipo de producto lo justifica, puede ser oportuno y enriquecedor entregar a los entrevistados una libreta de consumo o utilización.
Esta técnica de recolección de datos tiene dos ventajas principales: por un lado, al completar el cuestionario declarativo, permite obtener datosmas fiables y factuales que si provinieran solo de la memoria de los entrevistados. Por otro lado, les permite a los entrevistados tomar perspectiva sobre sus propias actitudes y tomar consciencia de sus usos y actitudes, confiriéndole así una riqueza adicional al estudio desarrollado.